Señor Director:
 
Antes de todo, quisiera extenderles un cordial saludo y felicitarles por la excelente Revista Avance. Sus artículos son variados e informativos y evidencian la profesionalidad y seriedad de los escritores. Además, es importante que la literatura y el periodismo resalten aspectos importantes de la historia, cultura y folclor local. Su revista cumple con esta tarea a cabalidad. 
 
Quería aprovechar la ocasión para felicitar al Dr. Marco Tello por la historia corta intitulada “Entre el temor y la obsesión”. Si es el caso, por favor extiendan al autor mis elogios por tratarse de un texto de alta calidad literaria.
 
Sin más por el momento, me despido reiterando mis felicitaciones y augurándoles muchos éxitos.
 
Sinceramente,
Samuel Sarmiento, MD
 
 
 
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Sobre Germán López Rueda:
 
Gracias por esta ricura de escrito: Qué maravilla de artículo. Me dio un sacudón emotivo profundo. Me ha hecho ver cosas de la ciudad de Cuenca que no había visto antes. Y por supuesto, el recuerdo inmensamente grato de mi maestro José López Rueda con su Historia Antigua o con el Griego que entonces no tenía claro para qué servía. Con frecuencia iba a su casa para consultar cosas que necesitaba y siempre encontré la atención afectuosa. De Germán López, su hijo, tengo presente su espíritu cordial y juguetón y pensar que ahora es un profesional y padre de familia poseedor de una excelente capacidad para expresar su sentimiento frente a su ciudad natal. Estoy feliz de haber sido su maestro de “primeras letras”.
 
Hugo Cobos Carchi
 
 
 
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Estimado Rolando:
 
Quería expresar mi enorme agradecimiento por la publicación en la distinguida revista Avance del texto con mis impresiones sobre la hermosísima ciudad de Cuenca. Me ha emocionado sobremanera, y lo digo de todo corazón. 
 
Ha sido un verdadero honor ser publicado en Avance y le deseo todos los éxitos profesionales que su quehacer merece.
 
La publicación en Avance ha hecho que culmine con broche de oro mi viaje sentimental y físico hacia la infancia (nunca mejor dicho aquello de que “la infancia es otro país”), en mi caso una joya de ciudad de la que cualquiera puede enamorarse y en la que me enorgullece haber nacido.
 
Un afectuoso y agradecido saludo de 
 Germán López Rueda (Madrid)
 

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